miércoles, 15 de junio de 2011

Taxi Driver: cuando la soledad y la ira rozan con la locura



Me acuerdo haber visto Taxi Driver (1976) a los 13 años aproximadamente, en el año 1995. En esa época estaba empezando a ver cine que no era considerado para toda la familia como las cintas de Tarantino, Coppola, Lynch, Stone, etc. Eran films violentos y que tocaban temáticas  a veces un poco sordidas, de personajes marginales y a mi sencillamente me encantaba (mi mamá lo odiaba). De todos, el que consideraba preferido de los viejos maestros era Martin Scorsese.

Scorsese es un gran director, fácil uno de los mejores de la historia, eso nadie lo duda. Fuera de eso creo que Scorsese fue bendecido al haber conocido en su juventud a un aspirante a actor llamado Robert De Niro. El destino los unió y juntos crearon varias de las películas más memorables de los últimos 40 años (algunas más serán tocadas en próximos posts). Una de esas cintas es la genial Taxi Driver. La cinta trata acerca de Travis Bickle, un veterano de Vietnam que trabaja como taxista en las noches. Bickle trata de lidiar con la extrema soledad en la que vive y su desencanto con el mundo que lo rodea, lo cual poco a poco  lo va haciendo descender en un espiral de violencia y locura. Para eso se obsesiona con dos mujeres. Una trabaja en la campaña de un candidato a la presidencia con la que trata de empezar una relación sentimental. Por otro lado está una prostituta de 12 años intepretada por Jodie Foster la cual quiere salvar de las garras de un "pimp" interpretado por Harvey Keitel, esto último con violentas consecuencias. 


Para ser justos, en el caso de esta película, hay una pieza más de la ecuación que no es mencionada tantas veces como los mencionan a Scorsese y De Niro y es el guionista de la cinta, Paul Schrader. Schrader afirma que escribió el guión en una etapa depresiva y suicida de su vida. Ha llegado a contar que la escribió con un revolver cargado junto a la máquina de escribir haciéndose jurar a si mismo que si dejaba de escribir se pegaba un tiro en la cabeza. Dice que la desesperación, la soledad y la ira hacia la sociedad que el personaje Travis Bickle siente en la cinta la sentía en la vida real.


Cuando me tocó ver Taxi Driver nunca pensé que una película se me iba a quedar tanto tiempo en la cabeza, reviviendo momentos, recordando líneas de diálogo, recordando esa imagen icónica de De Niro con el corte mohawk tipo indio.


Una de las cosas que más me sorprendieron fue como usaron tan bien el recurso del voice over para expresar todo lo que sentía el personaje y como iba descendiendo en ese espiral de rabia y locura. Muchos "conocedores" del cine afirman que el voice over es un recurso facilista ya que te permite escuchar los pensamientos de un personaje y te ahorra tener que mostrarlo solo en acciones y diálogos como se supone el guión manda. El tema acá es que Travis Bickle es un personaje muy complejo y contradictorio y creo que la única forma de mostrar con claridad su desesperación era con el voice over.


Como mencionaba más arriba, dos elementos que definen al personaje son la soledad y la ira. "Loneliness has followed me my whole life. Everywhere. In bars, in cars, sidewalks, stores, everywhere. There's no escape. I'm God's lonely man." Eso dice Bickle en una escena de la cinta en la que está reflexionando acerca del lugar que tiene en el mundo. Ve su salvación en una mujer, Betsy, interpretada por Cybill Shepherd, a la cual conoce y logra convencerla para salir con él en una cita. En esa cita Travis demuestra lo desadaptado que es al llevarla a ver una cinta pornográfica. Travis pierde su oportunidad tener una vida normal, de llenar un vacío, lo cual lo hace bajar un escalón más hacia la desesperación y la ira. A su vez también hace que muestre que es humano y que se puede sentir herido por el rechazo.


Llega un punto de la cinta en que el Travis está cada vez más desatado y rabioso contra todos. La sociedad, la mujer que lo rechazó, la delincuencia. "Listen you fuckers, you screwheads. Here is a man who would not take it anymore. A man who stood up against the scum, the cunts, the dogs, the filth, the shit. Here is a man who stood up." Travis se ve a si mismo como el hombre que va a limpiar a la ciudad y la única forma que sabe como hacerlo es a través de la violencia. Él es un elegido, un exterminador.


Se propone como meta salvar a una prostituta de 12 años y hacer que deje la prostitución. Primero trata de hacerlo hablando con ella pero falla. Cuando Travis decide empezar a "limpiar" la ciudad comienza por ir tras la chica lo cual nos lleva al climax de la cinta y a la escena más violenta de esta. Scorsese llega a un punto medio entre la estilización de la violencia y la crudeza de esta.


Taxi Driver, desde mi punto de vista, es una cinta de defogue. Por momentos puedes llegar a identificarte con parte de la frustración, ira y soledad que siente Travis y de esa forma expulsar esa carga a través de las acciones extremas que el personaje realiza y que uno como espectador ve en la cinta. Todos nos hemos sentido frustrados alguna vez. Todos tenemos un Travis Bickle dentro que, por el bien de todos, sabemos manejarlo.

 

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